José Luis,
Excelente artículo y reflexión.
En primer lugar, la evaluación tiene que dejar de protagonizar el aprendizaje. Llegué a la misma conclusión. Me parece que aún se nota tantos siglos del rol del profesor como autoridad. ¿Por qué suponemos que los alumnos tienen que mejorar? Aunque tengamos claro la evaluación inicial, damos por sentado que ignoran contenidos, habilidades y destrezas. Nos encarnizamos para enseñarles, como hienas.¿Por qué no nos bajamos del pedestal y los ayudamos a construir un aprendizaje? También tenemos que confesarles que aún nos falta para aprender.
A parte de tus lecturas, añadiría #rEDUvolution de María Acaso. Me parece crucial el capítulo de pedagogía y poder. Ya no soy el mismo docente después de su lectura. También son muy interesantes sus reflexiones sobre la evaluación: verdades como puños.
Saludos,